martes, 28 de abril de 2015

Cada noche
todas las noches
Me acuesto y doy gracias mirando al techo de mi habitación.
El mismo que pienso como abierto
Cuando medito
Cuando me imagino en mi casa
De madera en el lago

Gracias por haberme regalado un día más
Mientras te inflamas por dentro
Desde las entrañas ya carcomidas
A los pulmones llenos de miedo

Y llevo varios días
Que cuando doy gracias
No pienso
Que esté bien así
Que te deshagas
Por qué
Para qué
Por cuánto

No mereces perder
No mereces dejarte ir
No mereces
No
N.


1 comentario:

Beauséant dijo...

a veces sólo podemos ver como alguien se deja ir y cada vez parece más lejos de todo y de todos..

que no sé si hablabas de eso en tu poema, pero me lo ha recordado, ya ves